Roma XXI

Tengo ganas de decir muchas cosas, pero el tiempo y el espacio me limitan, estoy cansada (en muchos sentidos) y ahora sólo quiero tranquilidad. A veces la frustración me sobrepasa y no se como enfrentarla... a veces lloro, otras callo, pero el sentimiento es el mismo. ¿Cómo hacer para contrarrestar esta situación? El mundo gira y nosotros giramos con él.

¿Hasta que punto conseguiremos alienarnos de la realidad circundante? Temo. Detesto esto, vivir así: coartada. Me limitan mis emociones, mis sentidos, mis pasiones; debo ser quien el mundo quiere que sea y olvidarme por completo de lo que Yo quiero ser. El mundo no está diseñado para pensar, sólo nos quieren sometidos e inactivos, aplacados por la magnificencia del poder y relegados a los últimos rincones de cada lugar.

A veces sólo quiero desertar y bajarme de este mundo, desconectarme y quitar las ansias de consumo que me gobiernan (y que nos gobiernan), pero creo que la 'sociedad del consumo' es mucho más fuerte que mi voz, al fin y al cabo nada de lo que intentemos hacer se llevará a buen puerto si no nos insertamos, todo propósito, fin u objetivo te conduce a lo mismo... "Todos los caminos te llevan a Roma", y ahora en el siglo XXI, Roma es sinónimo de Consumo.